Batalla de las Mil Cavernas

Al llegar, lo arrojó a los pies del rey Thingol, señor del reino, y luego, arrepentido, saltó de los acantilados al océano del occidente y de ese modo terminó el más poderoso de los hombres mortales.

Al terminar la tarea, estos exigen a Thingol que se lo entregue, porque eran ambiciosos y en realidad eran los enanos quienes forjaron el Nauglamír, pero él se negó.

Al saber eso el señor de Nogrod reunió a su ejército para atacar Doriath.

Y poco después, al ser un espíritu menor, regresó a Aman, el reino de los poderes y la cintura de Melian, el encantamiento que protegía a Doriath, se rompió.

Los enanos penetraron Doriath y entraron en Menegrot, la capital, donde se enfrentaron a las fuerzas de Mablung, alto capitán de Doriath, y los enanos sufrieron grandes pérdidas Pero al final los Elfos fueron derrotados y ahí cayó Mablung, "el de la mano pesada" con su última mirada posada en el Nauglamír, que fue tomado, mientras los elfos grises huían de los enanos.