Batalla de Trocadero

El comandante militar de Madrid capituló en secreto y huyó a Francia, y las guarniciones no pudieron liberar Madrid de los franceses, que instalaron al Duque del Infantado como regente hasta la llegada del rey Fernando.Las fuerzas francesas llegarían hasta Cádiz en busca del rey y, con objeto de capturar la ciudad, asediaron la isla donde estaba el fuerte del Trocadero (Puerto Real) que controlaba el acceso a aquella.[3]​ El ataque fue tan súbito que no hubo siquiera opción de escapar.El ejército francés tomó la fortificación construyendo nuevas baterías que apuntaban a Cádiz.[5]​ Renunciando a su compromiso de amnistía con los revolucionarios, el rey ordenó represalias despiadadas mientras estuvieron las tropas francesas.
El duque de Angulema en la batalla de Trocadero, por Hippolyte Delaroche .