Batalla de Poitiers (1356)

Habiendo sufrido ya dos graves derrotas (una naval en Sluys y otra terrestre en Crecy), las fuerzas francesas se enfrentaban, en los años de 1350, a las violentas y rápidas chevauchées (cabalgadas) inglesas, un tipo de incursión que castigaba especialmente a la población civil.

Los campesinos, al no sentirse protegidos de las cabalgadas poco a poco gravitaban hacia los señores feudales locales solicitando ayuda, y esto dividía y sembraba el caos en las fuerzas francesas, que necesitaban una gran cohesión y sentido nacional, especialmente para que la gente entregara a sus varones jóvenes en las frecuentes levas o reclutamientos, que se hacían imprescindibles.

Llegado a la orilla del río Loira junto a la ciudad de Tours, no fue empero capaces de tomar el fuerte castillo que la defendía, y un enorme aguacero impidió también que la ciudad fuese incendiada por los sitiadores.

Este retraso hizo que el rey francés decidiera atrapar al ejército de Eduardo.

Tomás Felton luchó no solo en Poitiers sino también en la batalla de Crécy.

El ejército francés también incluía un contingente de escoceses comandados por Sir William Douglas.

Éste no quería entablar una batalla franca, pues se sabía ampliamente superado en número y muy escaso en recursos y suministros, circunstancias éstas que lo hacían desear retirarse hacia Burdeos.

Las tropas inglesas llegaron a la aldea de Nouaillé, donde había una abadía, y los monjes les pusieron sobre aviso de que si se acantonaban en el bosque vecino, sus posiciones serían casi inexpugnables.

El objetivo de este grupo era cargar sobre los arqueros ingleses y eliminar la amenaza que planteaban.

[15]​ Los ingleses esperaban esto y rápidamente contraatacaron, lanzando una lluvia de flechas sobre los caballos.

[16]​ Dadas las acciones posteriores de los arqueros, lo más probable es que Baker tuviera razón.

Los franceses fueron incapaces de superar los setos protectores que los ingleses estaban usando.

La infantería del delfín se enzarzó en una lucha encarnizada hasta ser obligado a retroceder para reagruparse.

Su hijo menor, Felipe, permaneció con él y luchó a su lado en la fase final de la batalla.

[20]​ Entre los personajes notables capturados o muertos estuvieron, según Froissart: Es Froissart, de nuevo, quien ofrece una vívida descripción de la captura del rey Juan II y su hijo menor en este pasaje:

La suma era imposible de reunir, y Juan, sin lograr regresar a Francia, falleció en Londres en 1364.

Los Valois habían salvado el reino a costa de unas enormes concesiones al enemigo.

Jean de Venette, un fraile carmelita y cronista medieval, describe vívidamente el caos que se produjo en Francia, del que afirma haber sido testigo él mismo, después de esta batalla.

La batalla de Poitiers (1356) Eugène Delacroix .
Maniobras previas a la batalla de Poitiers, del 13 al 19 de septiembre; en azul, el ejército del rey de Francia; en rojo, el ejército del príncipe de Gales.
Mapa de la batalla.
Juan II, el Bueno, capturado por los ingleses.