Batalla de Cabezón

Cuesta sabía que debía organizarlo todo con la mayor rapidez posible pues el cuartel general francés se sitúaba en Burgos.

Se encontró con un gran problema para organizar la defensa, pues Castilla poseía una deficiente infraestructura militar y no disponía de ningún ejército regular.

Sin embargo, llevado por el entusiasmo de sus hombres, Cuesta decidió cruzar el puente y atacar a las fuerzas francesas, que les doblaban en número.

El resultado era previsible, pues la veterana caballería de Lasalle aplastó a los novatos reclutas, provocando una desbandada general encabezada por Cuesta, y pudo marchar hacia Valladolid.

Valladolid fue ocupada inmediatamente y lo mismo ocurrió pocos días después en Santander.

Campo de batalla de Cabezón.
El general García de la Cuesta