Su posición estratégica, prácticamente en el centro del norte peninsular, convirtió a Valladolid en un punto obligado de paso para todo aquel que desease dirigirse al sur peninsular, así como, para todo aquel que desease dirigirse a la capital española.
Un año más tarde, se produjo la inauguración del segundo aeródromo de la ciudad.
Este año, comenzaron las primeras gestiones para localizar el lugar más idóneo y cuyos habitantes estuvieran de acuerdo en ceder los terrenos necesarios.
En 1939, tras el fin de la Guerra Civil y ya durante la época franquista, se instaura en el aeropuerto la que sería la 1.ª Brigada Aérea; se convertía, no solo en el único aeródromo en Valladolid, sino que este movimiento también supuso que desde 1936 se cerrase la puerta al tráfico civil en la ciudad.
Como colofón, un año más tarde, se establece el 33.er Regimiento, con el que finalizó, por el momento, la dotación militar en el lugar.
Unos trescientos prisioneros se hacinaban en barracones sin agua para uso personal, sin camas o colchonetas («hacen el oficio unas tablas de madera»); un informe oficial añadía: «La higiene personal es desastrosa, todos los individuos están parasitados de piojos en gran cantidad y la sarna hace presa en ellos etc.».
No obstante, aun hubo que esperar tres años más, a mediados de 1949, cuando, se efectúa la inauguración del Real Aeroclub de Valladolid, cuyo edificio sigue aun en pie, y cuenta con la única cafetería al aire libre del aeropuerto.
[4] No sería sino hasta 1972 cuando se retomarían las actuaciones en el aeropuerto de Valladolid.
El ILS instalado era de categoría I, y se ubicó en la pista 23, y ha permanecido activo durante casi veinticinco años, hasta que fue cambiado por un nuevo ILS de categoría II/III.
La actuación de instalación del ILS en categoría I se consideró como de gran importancia para el aeropuerto, debido a las dificultades para aterrizar durante el invierno, asociado a las frecuentes y densas nieblas que aparecían por la zona aeroportuaria.
Los vuelos internacionales que realizaba la compañía Ryanair fueron suprimidos en marzo de 2013.
A estos destinos regulares hay que sumarles las rutas chárter que se realizan desde este aeropuerto para organizaciones de viajes para personas mayores de la comunidad.
Dispone de 8 aviones CASA CN-235 de vigilancia marítima operados por las Alas 46, 48 y 49 y 16 aviones Beechcraft Bonanza del Grupo 42, además opera 2 C-212 Aviocar cedidos por el 721 Escuadrón.
En cuanto al número de operaciones se registró un ligero ascenso, hasta llegar a las 4650.
Fuente: Estadísticas Aeropuertos Españoles por año (AENA) Frecuencia aproximada de 90 minutos.
El precio es de 3,00 € el billete sencillo, llegando a costar 1,15 € adquiriendo bonos.
[2] En el aeropuerto solo ha habido un accidente reseñable: Además ha estado involucrado de manera indirecta en los siguientes episodios:[16]