Se dedicó en su juventud al comercio y la agricultura, y se enroló en el Ejército del Norte poco después de la Batalla de Suipacha.
Participó en las batallas de Huaqui, Tucumán, Salta, Vilcapugio y Ayohuma.
El nuevo gobernador nombró para ser su comisionado a su tío, el capitán De la Corte.
En estas dos invasiones, De la Corte se vio obligado a evacuar la ciudad de Jujuy, pero se mantuvo en sus alrededores, hostilizando a sus enemigos.
Tras la recuperación de Salta y Jujuy por los patriotas, el general Gorriti fue nombrado gobernador por el partido del fallecido caudillo.
Los revolucionarios nombraron teniente de gobernador a De la Corte, pero éste no llegó a hacerse cargo del mando, ya que estaba muy enfermo y falleció pocos días después.