Fue un escolapio que colgó los hábitos, se apuntó a la logia Avant y participó en campañas anticlericales con dos periódicos en Barcelona: fue director de la La Tronada Anticlerical[1] (1881) y El 1º de Mayo, este último anarquista.
Tuvo algunos enfrentamientos con Ernesto Bark y otros escritores, tanto ultramontanos como librepensadores.
Escribió La Milicia Negra (Barcelona, 1883), Las ciencias Laicas o la piqueta y el compás (Barcelona: Librería Laica-Anticlerical, 1884) entre otras obras, folletos virulentamente anticlericales y diversos libros de texto laicos.
Fundó una especie de filosofía llamada pantotropismo o pandotropismo, cuyo lema era "todo para la humanidad".
Según Ossorio y Bernard, Gabarró habría hecho «solemne retractación de sus errores» en Roma en 1897.