[1] El yacimiento del Barranco Tuerto se localizó en algún momento entre las décadas de 1940 y 1950, en un momento en que el arqueólogo José María Soler García estaba realizando intensas prospecciones por todo el término de Villena.
[1] En 1995 se reanudaron las excavaciones arqueológicas, que posibilitaron conocer completamente la planta y el registro material del asentamiento.
[1] Ocupa una extensión aproximada de 170 m² y, en su fase más artigua, se articulaba en torno a una pequeña cabaña de planta casi circular, por cuyo vano se accedía un patio o porche, posiblemente abierto al este.
[1] En algún momento, la cabaña fue destruida por un incendio, a lo que sucedieron varias remodelaciones de las que no han quedado apenas restos dada la intensidad de la erosión en la zona.
[1] Por ello, es difícil establecer el momento del abandono definitivo, que debió producirse hacia el 1500-1400 a. C.[1] Dada la ubicación del yacimiento y sus características, el poblado respondería a un modelo de organización territorial en que desempeñaría principalmente funciones logísticas.