Cuando se le aplica una torsión, el material reacciona con un par torsor contrario o recuperador.
Coulomb empleó la balanza para medir la fuerza electrostática entre dos cargas.
Para medir la fuerza electrostática se puede poner una tercera bola cargada a una cierta distancia.
Las dos bolas cargadas se repelen/atraen unas a otras, causando una torsión de un cierto ángulo.
De esta forma se puede saber cuanta fuerza, en newtons, es requerida para torsionar la balanza un cierto ángulo.