Fue descubierto en 1988 cerca de Chillagoe, en Queensland (Australia),[1] siendo nombrado así en honor de Sturges W. Bailey, geofísico estadounidense, y por cloro por ser del grupo de la clorita.
Es un aluminio-silicato hidroxilado de cinc, hierro, aluminio y magnesio.
[1] Además de los elementos de su fórmula, suele llevar como impurezas: manganeso y calcio.
Se ha encontrado en el depósito "Red Drome" de Chigaloe, en Australia, donde aparece en vetas de calcita, dentro de una brecha fuertemente oxidada.
Suele encontrarse asociado a otros minerales como: andesina, granate, vesubiana, chamosita cíncica, goethita, hematites, calcosita, cobre, malaquita o calcita.