Se conoce solo por restos fragmentarios de distintivas vértebras del cuello, alargadas, que caracterizan a los miembros de su familia, los azdárquidos (Azhdarchidae), que también incluyen pterosaurios gigantescos como Quetzalcoatlus, Hatzegopteryx o Bakonydraco.
El nombre específico Azhdarcho lancicollis proviene de las palabras latinas lancea (lanza) y collum (cuello).
El señaló características similares en varios otros pterosaurios, y las usó para erigir una nueva subfamilia, Azhdarchinae, dentro de la familia Pteranodontidae.
Sin embargo, investigación posterior no ha seguido esta sugerencia, y A. lancicollis es la única especie actualmente reconocida de Azhdarcho.
[1] Investigaciones posteriores han mostrado que los azdárquidos pueden haber tenido una existencia más terrestre similar a la de las modernas cigüeñas, alimentándose de pequeños animales que atrapaban en el suelo.