Si bien ya tenían las maquetas terminadas, las canciones aún no estaban listas en la parte de arreglos.
En consecuencia, el productor Gustavo Santaolalla les propuso hacer un «disco de transición» compuesto únicamente por versiones, idea que la banda aceptó.
La banda utilizó una consola con ecualizadores aportados por Gustavo Santaolalla con dos micrófonos que registraron lo grabado en ADAT.
[9] Diversos ruidos incidentales causados por las grabaciones en un local de ensayos fueron dejados en el producto final.
En México, al igual que el disco anterior Re, tendría una recepción moderada.