Fue una figura prominente en la reforma del Ejército prusiano y en las Guerras de Liberación (Sexta Coalición).
Convertido en Stabskapitän (capitán de Plana Mayor) en 1790, Gneisenau sirvió en Polonia durante 1793-1794.
El comandante recibió la muy preciada Pour le Mérite y el ascenso a teniente coronel.
Aunque primeramente se dedicó al problema de la reorganización militar, también ejerció considerable influencia en la política general del Ministerio.
Pero, después de visitar Austria, la Rusia imperial, Suecia e Inglaterra en misiones secretas, retornó a Berlín y reanudó su puesto como jefe del partido patriótico.
En recompensa, Gneisenau logró un nuevo ascenso y fue nombrado caballero de la Orden del Águila Negra.
Como soldado, Gneisenau probó ser el más importante general prusiano desde Federico el Grande.
Además, varias ciudades alemanas tienen calles con el nombre «Gneisenaustrasse» (Calle de Gneisenau), tales como Berlín (que también tiene una estación de ferrocarril U-bahn con su nombre), Leipzig, Hamburgo y Heidelberg.