Atención prenatal

Se suele iniciar este tipo de atención cuando la mujer descubre que está embarazada.

[2]​ Por lo general, la atención prenatal comprende un examen físico de la embarazada por un médico, examen ginecológico en la que incluye citología que descarta enfermedades del cuello uterino como el VPH, valoración cardiovascular, verificación de inmunizaciones (rubeola, hepatitis), verificación de infecciosos como el toxoplasma y VIH, y determinar cuando un embarazo se trata de alto riesgo.

En este último caso se puede seguir este cronograma Se define un embarazo de bajo riesgo aquel que presenta evidencias de tener las condiciones óptimas para asegurar el bienestar a la madre y el feto y carece de antecedentes patológicos o epidemiológicos que aumenten la probabilidad de que la madre o el feto desarrollen una enfermedad.

[6]​ Los embarazos de alto riesgo se dividen en tres tipos: La atención prenatal es una oportunidad para que los profesionales tengan más oportunidades para detectar y gestionar los posibles enfermedades.

El asesoramiento sobre hábitos saludables de alimentación, nutrición óptima y qué vitaminas o minerales deben tomar las mujeres durante el embarazo puede contribuir a que las mujeres y sus niños en desarrollo se mantengan sanos durante y después del embarazo.

Médico realizando un examen prenatal en El Salvador .