En un terremoto que devastó la ciudad el cuadro del Santo Ecce Homo (la pintura más antigua de Cuba) lloró sangre en la catedral, y fue una de las pocas reliquias que pudieron salvarse, lo que lo convirtió en un objeto de devoción popular durante siglos.En 1722, se fundó en esta ciudad el Colegio-Seminario San Basilio Magno, primera casa de altos estudios del país, 6 años antes que la Universidad de La Habana y 54 antes que el Seminario de San Carlos y San Ambrosio.En 1873 el gobierno republicano español nombró arzobispo a Pedro Llorente Miguel, sin el consentimiento de la Santa Sede.De 1873 a 1876 radicó en la arquidiócesis la beata Dolores Sopeña.En Santiago de Cuba también vivieron el venerable Jerónimo Usera y el siervo de Dios fray Esteban Adoáin a mediados del siglo XIX: el primero antes, y el segundo durante el episcopado de Claret.En 1882 fue declarada la catedral metropolitana como basílica menor por el papa León XIII (la primera del Caribe).En 1916 se recibió del papa Benedicto XV la declaración de la Virgen de la Caridad del Cobre como patrona de Cuba y en 1936 fue coronada en la Alameda de Michaelson por fray Valentín Zubizarreta, entonces arzobispo, con el visto bueno del papa Pío XI, en el Congreso Eucarístico Diocesano.