La etimología del nombre es claramente vasca, fruto de la proximidad de la localidad con el País Vasco y que en ella el euskera fue hablado hasta aproximadamente el siglo XVIII.
Está compuesto por las voces vascas Art(h)e (encina), y el sufijo abundancial vasco -eta que indica pluralidad, por lo que el topónimo nos indica un encinar.
Cuando en el año 1833 cae el Antiguo Régimen, Artieta se incorpora al municipio de Valle de Tudela, que al desaparecer en 1845, hace que Artieta se acabe incorporando definitivamente al Valle de Mena.
Otros estilos, cuentan con elementos del arte neoclásica y algunas pocas evocan la arquitectura medieval.
Otro edificio importante es la Iglesia, de planta rectangular menesa.