[1] Gran parte del arte que se desarrolló inicialmente en el territorio que en la actualidad ocupa Israel fue arte decorativo religioso (principalmente judío o cristiano), producido por peregrinos religiosos, aunque también para exportar y uso local.
[2] En los asentamientos judíos los artistas trabajaban en joyería con oro, plata y elaborando bordados, produciendo su obras en pequeños talleres de artesanos.
En las fotografías del fotógrafo francés Felix Bonfils, tales como por ejemplo aquellas prominentes de la Tierra Santa en las últimas décadas del siglo XIX, se puede observar un fondo artificial de desierto, frente al cual posan las figuras.
A finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX, comienzan a aparecer fotógrafos locales, entre los que se destaca Khalil Raad, quien se concentraba en brindar una descripción etnográfica de la realidad de Tierra Santa, en gran medida colonialista.
[1] Hasta comienzos del siglo XX no existía una tradición de arte en el territorio ocupado por Israel si bien artistas europeos venían como visitantes y pintaban la "Tierra Santa".
Samuel Hirszenberg (1865–1908) realizó un aporte completamente diferente, al incorporarse como profesor a Bezalel.
Hirszenberg incorporó la pintura académica europea a Bezalel, y pintó temas judíos dentro de este esquema.
Entre los artistas destacados que enseñaban en Bezalel estaban Ephraim Moses Lilien, Meir Gur-Arieh, Arnold (Aaron) Lachovsky, Erich (Arie) Goldberg, Adolph (Avraham) Berman, Shmuel Levi (Ophel), y otros.
Otras exposiciones de Arte Moderno se realizaron en el espacio anexo al teatro Ohel en Tel Aviv entre 1926 y 1929.
Algunos de sus miembros, tales como Orloff y Tagger, mostraron influencias del Cubismo francés en sus obras.
El grupo realizó una exposición en 1929 en un departamento en la calle Allenby en Tel Aviv, enfrente del Mograbi Theater.
Israel Paldi (Feldman) presenta escenas del entorno desierto con una paleta de colores y sombras brillantes.
Otro artista, Abel Pann, expresó este enfoque romántico al concentrase en temas de la Biblia presentados en ilustraciones en un estilo fantástico.
A menudo Reuven Rubin pintó temas sobre la existencia judía en la Tierra de Israel.
En "Primeros Frutos" (1923) Rubin presenta figuras típicas de 1920, intercaladas con un elemento poderoso y fantástico.
Junto con pinturas de la ciudad de Jerusalén y sus pobladores, the special Land of Israel light, que tanto preocupaba a los artistas jóvenes, es presentada en sus pinturas en un marcado contraste que enfatiza las imágenes oscuras sobre un fondo claro.
Este experimento refleja el interés británico en el arte tradicional en el espíritu del movimiento de Arts and Crafts.
El principal artista durante los primeros años fue David Ohannessian (1884-1953), quien se especializó en cerámicas decorativas para estructuras y monumentos, muchos de estos trabajos realizados por pedido del gobierno británico.
Gideon Efrat sostiene que estas influencias crearon dos tendencias distintas en las artes plásticas.
Un escultor que fue influido por el Cubismo fue Zeev Ben Zvi quien en 1928, luego de terminar sus estudios en Bezalel, viaja a Francia.