[2] En el territorio venezolano se han identificado al menos 320 estaciones de petroglifos,[3] entre esos: Otros lugares donde se han hallado petroglifos son: La arquitectura indígena venezolana era trabajada en dos espacios diferentes, el agua y la selva.
Cuentan los historiadores que cuando Américo Vespucio llegó a costas venezolanas y observó los palafitos del Lago de Maracaibo, llamó al lugar "Pequeña Venecia", donde derivó tiempo después el nombre de Venezuela.
[cita requerida] En cambio, las etnias que habitan las selvas tienen una arquitectura distinta, la churuata, era y sigue siendo el tipo de vivienda predominante en los poblados indígenas.
La churuata se ha convertido en los últimos años en un icono de la cultura venezolana, pues ha sido llevada a las ciudades, en espacios públicos como parques, Mansiones, restaurantes, sitios de esparcimiento, hoteles e inclusive como espacio incorporado en casas modernas.
Aunque las viviendas más apreciadas y que más han perdurado hasta la actualidad en los pueblos indígenas son el palafito y la churuata, otras etnias tenían su modelo propio de vivienda.
Los indígenas venezolanos básicamente usaban madera, palos, palmas, caña, bambú, mangle y enea para la construcción de sus casas.
Venezuela no ofrecía entonces a los colonizadores las inmensas riquezas guardadas por la naturaleza para tiempos posteriores.