Después de estudiar en Alemania e Italia entre 1919 y 1924 se trasladó a Viena de donde tuvo que huir hacia Inglaterra en 1938 por sus orígenes judíos.
Siguiendo las investigaciones de la escuela historicista y sociológica alemana y la doctrina marxista de György Lukács, Hauser elabora una teoría del arte en la que analiza los fenómenos artísticos en estrecha relación con su contexto histórico y social y los fenómenos socioeconómicos.
En este sentido, se hace heredero del pensamiento de la Escuela de Viena y su crítica al positivismo: la sociología y el estudio del medio serán sus principales armas.
Rechaza la autonomía de las artes, ya que éstas están formadas por factores materiales que son interdependientes.
Por ejemplo, según él, el arte inicia "plano, simbólico, formal, abstracto y preocupado por los seres espirituales", luego en una sociedad agraria que socioeconómicamente tiende a ser cerrada y más conservadora su arte reflejará lo mismo; en la sociedad aristocrática se prefiere un estilo rígido y tradicionalista; mientras que la sociedad a más mercantil y burguesa menos jerárquica y autoritaria, prefieren elementos más naturales y un arte más naturalista.