Actualmente dirige a Rosario Central de la Liga Profesional.
[1] El reconocimiento que obtuvo como entrenador le permitió ser invitado a dictar clínicas de fútbol en Estados Unidos en Pennsylvania y Atlantic City.
Posteriormente dirigió un seleccionado de Buenos Aires, viajando en ocasiones a Estados Unidos para dictar charlas y clínicas.
En los primeros días de trabajo fue muy cuestionado por periodistas y exfutbolistas como Jorge Burruchaga, Ricardo Enrique Bochini o Daniel Bertoni, los cuales luego pidieron sus respectivas disculpas.
[cita requerida] La prensa amarilla y ciertos personajes del fútbol, poco acostumbrados al uso profesional de la tecnología en el deporte, consideraron estas declaraciones como una sobre-exposición.
[cita requerida] Estas críticas se fueron disipando a medida que el equipo empezó a jugar tal cual él había dicho, recuperando la identidad de juego que caracterizó a Independiente en los mejores años de su historia.
Esta victoria fue de una real importancia para el club, ya que no tenía ningún título desde 2010 y había pasado una temporada en la segunda categoría del fútbol argentino, algo inédito en su historia.
El público de Club Atlético Independiente agradeció al entrenador y le tomó gran cariño por el título y juego que logró imprimirle al equipo.
Una semana después de salir campeón decidió no renovar su contrato debido a las constantes amenazas de barrabravas del club, por no acceder a suspuestos pagos.
[10] El entrenador fue presentado a través de una llamada telefónica.
[10] Los hinchas tenían que marcar un número, en el que luego se escuchaba un mensaje del nuevo entrenador, anunciado su llegada en su primera experiencia en el fútbol mexicano.