En esa ribera, se encuentra el Galeró, que es un lugar de baños muy frecuentado por sus habitantes y los visitantes.
En él se pueden encontrar: nutrias, cangrejos autóctonos, madrillas, tortugas y barbos culirrojos.
El Algars forma en su recorrido, grietas naturales que almacenan agua y nos invitan al baño en los días calurosos del verano.
Podemos avistar sobrevolando la zona a las majestuosas: águilas reales y perdiceras.
Con suerte, divisaremos alguna cabra hispánica y seguro que vemos ardillas.
Si hacemos un recorrido nocturno es posible que nos crucemos con algún gato montés, jineta e incluso con el zorro.
Este santuario todavía es un centro de peregrinación, en el cual se celebra una romería todos los años, el primer sábado del mes de mayo, y que culmina con una tradicional misa en la ermita.
La guerra civil española de (1936 a 1939) también sacudió a este pueblo y en esa época el archivo municipal fue quemado pudiéndose salvar solamente los libros del registro civil.
Está flanqueada la ermita por ancestrales cipreses que le otorgan al lugar un aire místico.
En este pequeño municipio se encuentra un cine que proyecta películas para los socios de la Asociación Cultural El Galeró.
Este local dispone de un escenario recién reformado, donde se prevé realizar obras teatrales y actuaciones musicales.