Arctotherium

En América del Sur, donde no existían hasta ese momento carnívoros placentarios (félidos, cánidos, úrsidos, etc.), los inmigrantes holárticos experimentaron una gran radiación adaptativa que resultó en la aparición de nuevos géneros y especies.Entre los inmigrantes, los osos tremarctinos se diversificaron en América del Sur durante el Pleistoceno y, excepto una especie, se extinguieron a finales del Lujanense (Pleistoceno tardío).Esto resulta llamativo, ya que la otra especie del género (T. floridanus) se registra en el sur de América del Norte y en América Central desde el Plioceno hasta el Pleistoceno tardío.Por último, la falta de registro fósil y actual en América del Sur de osos de la subfamilia Ursinae (oso grizzly, negro, polar, etc.) es otra cuestión interesante dado que estos osos se encuentran ampliamente distribuidos en el mundo y ya se encontraban en América del Norte cuando los tremarctinos pasaron el puente entre ambos continentes.En América del Sur, existen registros de osos fósiles del género Arctotherium en Venezuela, Bolivia, Brasil, Uruguay, Chile y Argentina, con seguridad desde el Ensenadense (Pleistoceno inferior a medio; ca.La especie del Ensenadense (Pleistoceno temprano a medio) es la que presentaba individuos de mayor tamaño, mientras que las especies del Bonaerense (Pleistoceno medio) y Lujanense (Pleistoceno tardío a Holoceno temprano) poseían tamaños relativamente menores.Probablemente la cacería activa no haya sido la única vía de obtención de carne fresca, puesto que el gran poderío físico y la ferocidad inherente a todos los osos seguramente les permitía disputar el fruto de la cacería a otros grandes carnívoros del Pleistoceno (lo que se conoce como cleptoparasitismo) como el felino diente de sable.Por comparación con las especies actuales, puede inferirse que consumían también una gran variedad de alimentos tales como insectos y otros pequeños animales.Esto no implica que los osos excavaran las cuevas, sino que probablemente utilizaban las excavadas por otros mamíferos; probablemente edentados extintos como Glossotherium y Scelidotherium (Vizcaíno et al., 2001).Aunque no se posee evidencia directa, no se descarta la posibilidad de que estos osos hayan convivido con el hombre, ya que los registros más recientes de osos del género Arctotherium (aproximadamente 11 210 añosantes del presente, Prevosti et al.Sin embargo, se ha sugerido que en realidad pueden ser restos mal identificados de Arctotherium, lo que invalidaría esta especie, y que pertenecería a una especie de Arctotherium, o posiblemente a una nueva especie, Arctotherium balamoides, aunque todavía no está confirmado.En: Evolution and Environment in Tropical America, Jackson, JBC; AF Budd, AG Coates.International Conference on Bear Research and Management, abstracts, pp.PREVOSTI, FJ; LH SOIBELZON, A PRIETO, M SAN ROMAN, F MORELLO.Análisis de la variabilidad genética del Oso Andino (Tremarctos ornatus) en Venezuela, Colombia y Ecuador a partir de 5 loci microsatélites (Strps): La población ecuatoriana revela una baja variabilidad genética.Revista del Museo Argentino de Ciencias Naturales "Bernardino Rivadavia" 6(1): 107-133.SOIBELZON, LH; LM Pomi, Tonni, EP, Rodriguez, S y Dondas, A.First Report of a Short-Faced Bears’ den (Arctotherium angustidens).Cione, AL; MM Azpelicueta, M Bond, AA Carlini, JR Casciotta, MA Cozzuol, M de la Fuente, Z Gasparini, FJ Goin, J Noriega, GJ Scillato-Yané, LH Soibelzon, EP Tonni, D Verzi, MG Vucetich.Prevosti, FJ; LH Soibelzon; A Prieto; M San Román, F Morello.The broken Zig-Zag: Late Cenozoic large mammal and turtle extinction in South America.Revista del Museo Argentino de Ciencias Naturales "Bernardino Rivadavia" 5(1): 1-19.Revista del Museo Argentino de Ciencias Naturales "Bernardino Rivadavia" 6(1): 107-133.Cione, AL, EP Tonni, S Bargo, M Bond, AM Candela, AA Carlini, CM Deschamps, MT Dozo, G Esteban, FJ Goin, CI Montalvo, N Nasif, JI Noriega, E Ortiz Jaureguizar, R Pascual, JL Prado, MA Reguero, GJ Scillato-Yané, L Soibelzon, DH Verzi, E Carolina Vieytes, SF Vizcaíno, MG Vucetich.Mamíferos continentales del Mioceno tardío a la actualidad en la Argentina: cincuenta años de estudios.Soibelzon, LH; MR Romero, D Huziel Aguilar, VB Tartarini.Krause, J; T Unger, A Noçon, A-Sapfo Malaspinas, M Stiller, S-Orestis Kolokotronis, L Soibelzon, H Spriggs, PH Dear, AW Briggs, SCE Bray, S O’Brien, G Rabeder, P Matheus, A Cooper, M Slatkin, S Pääbo, M Hofreiter.Mitochondrial genomes reveal an explosive radiation of extinct and extant bears near the Miocene-Pliocene boundary.Revista del Museo Argentino de Ciencias Naturales "Bernardino Rivadavia" 19(2): 291-308.Goin, FJ; N Zimicz, M de los Reyes, LH Soibelzon.