[5] La copia más famosa de la Antigüedad clásica, era según Plinio, la estatua dedicada por el general romano Marco Vipsanio Agripa delante de las termas que llevaban su nombre.
El emperador romano Tiberio, gran admirador de la estatua, la hizo transportar a sus habitaciones.
[12] La estatua, realizada en mármol del Pentélico, no es de tamaño natural, sino ligeramente más grande, pues mide 2,05 metros.
Un tronco de árbol sirve de apoyo a la pierna izquierda; otro apoyo, que se rompió, soportaba el peso del brazo derecho, tendido sobre la pierna derecha.
La cabeza sorprende por su reducido tamaño: representa una octava parte del cuerpo.
La historiadora del arte, Brunilde Sismondo Ridgway juzga el efecto «casi cómico».