Adolescente, el Príncipe Antonio estudió arqueología.
Él y su hermano Federico acompañaron al barón Carlos de Mayenfisch en sus investigaciones en los alrededores de Sigmaringen, donde fue descubierto un fuerte romano.
Durante la batalla de Sadowa, logra capturar la bandera del regimiento austríaco Coronini, pero durante el ataque decisivo sobre las alturas de Chlum, es alcanzado por cuatro balas en la pierna.
Cuando se dispone a aplicar al príncipe un vendaje de urgencia, ambos son capturados por los austríacos, aunque son liberados inmediatamente después.
Las heridas son incurables y el príncipe termina por sucumbir treinta y tres días más tarde en un lazareto.