Organiza el paso de fondos y propaganda desde la dirección exterior hacia la estructura clandestina interna, dispersa por toda España.
Se relaciona con la dirección en Madrid de la UGT, y es nombrado Secretario General del PSOE en el interior.
Fue detenido en la redada de la Brigada Político-Social en 1953 contra la dirección socialista junto a Tomás Centeno (que moriría torturado).
En 1962, instalado de nuevo en su ciudad natal, es conocido internacionalmente gracias a una entrevista que le realiza la periodista italiana Rossana Rossanda.
Restrigió su actividad al País Vasco cuando Ramón Rubial se hizo con la dirección socialista, junto a Enrique Múgica y Nicolás Redondo.