Antoni Almirall

Nació en 1860, hijo de Joan Almirall y Antònia Romagosa i Vidal.Opuestos en cierta forma a la Escuela de Olot, cuyos pintores trataban el paisaje del interior de Cataluña con una luz más suave y tamizada, los artistas sitgetanos se decantaron por la cálida y vibrante luz mediterránea y por los efectos atmosféricos de la costa del Garraf.Herederos en buena medida de Mariano Fortuny, los miembros de esta escuela buscaban reflejar con fidelidad los efectos luminosos del paisaje circundante, en composiciones armoniosas que combinaban verismo y cierta visión poética e idealizada de la naturaleza, con un sutil cromatismo y una pincelada fluida que en ocasiones fue calificada de impresionista.[1]​ En 1892 participó en la Primera Exposición Modernista, que se celebró en Sitges, con los cuadros Marina, Jefe de estudios, dos titulados Impresión de playa y dos Patio.Almirall continuó en buena medida con el estilo luminista, aunque de una manera más personal y heterogénea, y con una notable influencia del modernismo catalán, especialmente por el influjo de Santiago Rusiñol, cuya obra admiraba.
Playa de Sitges (1882), colección particular