Las antenas son apéndices multisegmentados presentes en los metámeros anteriores de los artrópodos mandibulados.
En los crustáceos son birrámeas y están presentes en los dos primeros segmentos de la cabeza, llamándose al par más pequeño anténulas.
[1][2] Los insectos evolucionaron a partir de los crustáceos y retienen las antenas secundarias, pero no las primarias.
Otros hexápodos (relacionados con los insectos), Collembola y Diplura también tienen antenas, pero los Protura carecen de ellas.
[6] En la mariposa monarca las antenas son necesarias para determinar su orientación durante la migración.
Las del primer par son unirrámeas y a menudo se les denomina anténulas, mientras el segundo par es birrámeo, lo que significa que cada antena está formada por dos partes, unidas en su base.
[11] En la mayoría de los adultos las antenas son órganos sensoriales, pero se usan por las larvas nauplio para nadar y alimentarse.