Antón Román Conde

Su obra combina el racionalismo, el vanguardismo y también la estética tradicional, si era una solución adecuada.

Dejó obras singulares en diversos lugares de Galicia y también en Guinea Ecuatorial, en donde ejerció el cargo de arquitecto jefe delegado del gobierno durante el período colonial, entre 1940 y 1948.

Hijo de Luis, militar, y Elvira, tuvo cinco hermanos: Luis, Elvira, María Paz, Pedro y Manuel; este último, teniente de aviación, falleció en un accidente aéreo en 1946.

[4]​ Allí conoció a su mujer, Angelita Serralta Cases, nacida en Bioko (antes Fernando Poo), hija de colonos catalanes que administraban una extensa propiedad llamada "La Barcelonesa" para la compañía Rius y Torres, en donde se cultivaba cacao y café.

En su juventud se dedicó a la acuarela en pequeño formato sobre temas recurrentes como la navegación, el motociclismo y la figura femenina.

[15]​ Su legado artístico pertenece a la colección privada de la familia Conde Serralta.

Esta lámina cumple las funciones de estructura, cubierta y envoltorio, lo que permite conseguir un interior sin columnas o pilastras.

La estructura responde a una concepción trigonométrica del pliegue que marca ángulos (o picos) y crea ondulaciones entre ellos.

Estas tres obras se realizaron en colaboración con la empresa madrileña Construcciones Laminares S.L., de los arquitectos José Ruiz-Castillo y Ucelay y Ricardo Urgoiti, especializados en láminas de hormigón armado.

Como arquitecto en el Servicio de Obras Urbanas en la Guinea colonial, realizó equipamientos públicos, como escuelas, hospitales y residencias.

[8]​ Ramón Eiras señala que entre sus clientes estaban Rodrigo Alonso, Alejandro Barreras, Leopoldo Curbera, Manuel Sas, Luis Solano Aza o Alberto Casal.

Iglesia parroquial de la Inmaculada Concepción. [ 18 ]
Iglesia parroquial de San Paio de Navia.
Sofitel Malabo President Palace.
Capilla del Carmen, en el Vao.
ETEA.