Anita Fernandini de Naranjo

Su madre fue Isolina Clotet Valdizán, quien apoyó económicamente a Eulogio para las labores mineras y agrícolas, lo que llevó al matrimonio a formar una cuantiosa fortuna que se consolida en el año 1915, cuando son considerados como una de las familias más ricas de Sudamérica.

Ana María, era la dueña de una gran fortuna, fue considerada como la mujer más adinerada del Perú durante el siglo XX.

También presidió el Comité pro Basílica agrupación que se propuso construir una basílica a Santa Rosa de Lima, para lo cual se expropió casas y compró terrenos, pese a ello, no lo consiguió, ya que el convento de Santa Rosa fue declarado monumento, y el dinero recaudado fue al arzobispado de Lima.

Murió en 1982 a los 80 años y su mausoleo es uno de los hitos en las visitas guiadas al Cementerio Presbítero Matías Maestro.

Diferentes leyendas urbanas se han hecho respecto a su gestión, entre ellas se dice que doña Anita Fernandini mandó a tapar los genitales de las esculturas de Bellas Artes.