Más tarde se trasladó a Francia donde estudió en París bajo la dirección del químico Jean d'Arcet.
Continuó posteriormente sus estudios en Freiberg, en Alemania, bajo la dirección de Abraham Gottlob Werner.
Una vez en la Nueva España, realizó una muy valiosa labor docente y de investigación.
En 1820 fue elegido diputado ante las cortes españolas, en donde adoptó posturas separatistas abogando siempre por la secesión de la Nueva España.
Finalmente regresó a México en 1834 y asumió nuevamente su cátedra de Mineralogía.
Su obra y pensamiento político liberal fueron fundamentales para la construcción exitosa de la nueva nación mexicana.
Consiste en una medalla con la efigie de Andrés Manuel del Río y una placa conmemorativa.