[3] Debido a la guerra austro-prusiana, en la cual el reino bávaro tomó parte, y a su reconocida postura anti bismarckiana, Andrés Ebner apenas terminados sus estudios tomó rumbo en 1869 hacia América, originalmente hacia California, vía Cabo de Hornos.
Es muy probable que por su temprana edad (19 años), Andrés haya viajado bajo del tutelaje de familiares Anzenhofer.
Sus dos hermanos menores, Juan y Antonio, le seguirían en sus huellas años más tarde.
Tras un paso breve por Valparaíso, ciudad de la cual quedó visiblemente enamorado y encantado, siguió a Perú, donde permaneció durante 1869.
En 1873 y una vez radicado en Chile, Andrés contrae matrimonio con Caroline, del cual saldrán 12 hijos.
Contrario a lo que se indica en ciertas referencias, Ebner jamás estuvo en Talca, ni trabajó para Otto Schleyer, cervecero alemán radicado en dicha localidad.
Posiblemente debido a una ley que esblecia en 25 años como la mayoría de edad para iniciar negocios, Andrés registra su fecha de nacimiento un año más temprano, es decir, 1849; dato que se corrobora en su testamento dejado a la familia.
En 1878, decide comprar a la familia Koch una planta cervecera en la ribera norte del Mapocho.
Doce años antes, esta familia había perdido a su fundador, Juan Valentín Koch, un alemán también de origen bávaro.
Entre 1885-1888, Ebner renueva la fachada de la empresa, construyendo además en su sección sur lo que se convertiría en su oficina y nuevo hogar, vendiendo con ello sus dependencias en calle San Pablo a su hermano Antonio.
Hoy una importante calle y barrio de Quilícura usan su nombre exactamente donde estuvo localizado dicho fundo.
Finalmente en 1984 y gracias al Decreto Supremo 646 del Estado de Chile, la planta Ebner pasa a ser considerada monumento histórico.
Antonio al igual que Juan, también aportó con capitales a la empresa Andrés Ebner.