La alizarina fue utilizada como tintura roja para el uniforme "nuevo modelo" del ejército inglés parlamentario.
Este color rojo se convirtió en distintivo y continuó siendo utilizado por varios siglos, por lo que a los soldados ingleses y británicos se les daba el sobrenombre de "Casacas rojas".
En 1804, en Inglés el fabricante de colorantes George Field había perfeccionado la técnica de laca tratándola con alumbre y un álcali, que convierte el extracto soluble en agua en un sólido pigmento insoluble.
[5] [6] En 1826, el químico francés Pierre-Jean Robiquet encontró que la raíz de rubia contenía dos colorantes, la alizarina roja y la purpurina.
La cuasi simultaneidad permitió que BASF y Perkin llegaran a un acuerdo para la venta del colorante en el Reino Unido.
Por tratamiento con hidróxido de potasio concentrado (a 170 oC) se sustituyen los 2 bromos por -O-K+ (azul-violeta).