Alimento vivo

En algunos casos los animales pueden aprender a comer alimento muerto, pero debe ser lo suficientemente fresco.

Los grillos y otros invertebrados se deben atemperar a temperatura ambiente antes de suminstrarlos.

Los ratones para serpientes se meten en el microondas para descongelarse y simular una temperatura corporal similar a la de un ratón vivo, o mejor aún meter el ratón congelado en agua caliente a unos 40 °C y esperar a que se descongele y coja una temperatura adecuada.

Esta práctica evita que la presa se defienda y hiera al animal.

Además, es más fácil mantener el alimento congelado que vivo.

Un ejemplo de alimento ingerido vivo es la ostra .