Para virar la aeronave, el piloto pisa el pedal correspondiente al mismo tiempo que gira el yugo o cuerno y así se logra un movimiento coordinado y evitar maniobras riesgosas.
La finalidad de esto es aumentar la fuerza normal que ejerce el piso sobre el auto; de esta manera se aumenta la fricción entre los neumáticos y la pista y, en consecuencia, aumenta el agarre y tracción del auto, y en consecuencia la velocidad final del mismo.
Un año más tarde, este elemento apareció por primera vez en un modelo de producción europea, el Opel Commodore A GS/E.
El alerón está diseñado con una cara recta y una cara curva, o con ambas caras curvas pero con una de ellas de mayor desarrollo o longitud, de modo que el aire que pase por la curva lo tenga que hacer más rápido que el de la cara recta.
Por lo tanto, a velocidades muy altas se desactivan los alerones ubicados en las puntas de las alas, con lo cual se logra que los movimientos de la aeronave sean más suaves.