Afiliado a la Sociedad de Amigos del Pueblo y luego a la Sociedad de los Derechos del Hombre, tras la Revolución de julio de 1830 organiza en París unos cursos para obreros sobre la Revolución francesa que años más tarde publicará en forma de libro.
Esta idea la sintetizó en la frase «el pueblo no ha hecho más que cambiar de tirano», lo que le valió su encarcelamiento en la prisión de Sainte-Pélagie.
[1] Su ideario comunista inspirado en Babeuf lo desarrolla en el periódico L'Intelligence publicado entre 1837 y 1840 con el subtítulo «diario del derecho común», primero, y el de «diario de la reforma social», más tarde.
Uno de sus objetivos principales es el combate contra el liberalismo burgués que considera «hijo mayor del liberalismo girondino» y también la defensa de la idea de que la democracia solamente cobra sentido si va acompañada de «la extinción de la explotación del hombre por el hombre».
[2] A veces empleaba un cierto tono populista como cuando describe el «trabajo» de los ricos:[3]