Aunque tenía poco tiempo en 1819 para dedicarse a la poesía debido a problemas personales, para componer «Al Otoño», se inspiró en una caminata que realizó en una tarde otoñal cerca de Winchester.
«Al Otoño» incluye un énfasis en las imágenes del movimiento, el crecimiento y la maduración (carácter mimético).
[1] Desde la primavera hasta el otoño se dedicaba únicamente a la profesión de la poesía; su objetivo principal era escribir más de cincuenta líneas del verso, puesto que anteriormente era escribir poemas cortos o largos.
[6] Keats no envió «Al Otoño» a Reynolds, pero incluyó el poema dentro de una carta a Richard Woodhouse, editor y amigo de Keats, y lo dató en el mismo día.
y henchir la calabaza y rellenar de un dulce grano las avellanas: cómo abrir más y más flores tardías para las abejas, y en tanto crean ya que los cálidos días no acaban nunca, Sometimes whoever seeks abroad may find Thee sitting careless on a granary floor, Thy hair soft-lifted by the winnowing wind; Or on a half-reap'd furrow sound asleep, Drows'd with the fume of poppies, while thy hook Spares the next swath and all its twined flowers: And sometimes like a gleaner thou dost keep Steady thy laden head across a brook; Or by a cider-press, with patient look, A veces, el que busque fuera, podrá encontrarte sentado en un granero, en el suelo, al descuido, el pelo suavemente alzado por la brisa algo viva; o dormido, en un surco que a medias segaron, al aliento de las adormideras, mientras tu hoz respeta trigo próximo y flores enlazadas.
Y a veces, como una espigadora, enhiesta la cargada cabeza, un riachuelo cruzas; o junto a algún lagar de sidra, velas Think not of them, thou hast thy music too,- While barred clouds bloom the soft-dying day, And touch the stubble-plains with rosy hue; Then in a wailful choir the small gnats mourn Among the river sallows, borne aloft Or sinking as the light wind lives or dies; And full-grown lambs loud bleat from hilly bourn; Hedge-crickets sing; and now with treble soft The red-breast whistles from a garden-croft; Ni pienses más en ellas, pues ya tienes tu música, cuando estriadas nubes florecen el suave morir del día y tiñen de rosa los rastrojos; entonces el doliente coro de los mosquitos entre sauces del río se lamenta, elevándose o bajando, según el soplar de la brisa; y balan los crecidos corderos en los montes; canta el grillo en el seto; y ya, con trino blando, en el jardín cercado, el petirrojo silba «Al Otoño» describe, en sus tres estrofas, tres diferentes aspectos de la estación, su fertilidad, su trabajo y su declive final.
La primera estrofa del poema representa al Otoño involucrado en los procesos naturales, el crecimiento y la maduración final, dos fuerzas en oposición a la naturaleza, pero juntas creando la impresión de que la estación nunca finalizará.
[10] En esta estrofa las frutas todavía están madurado y los brotes se siguen dando por el clima cálido.
[11] En esta oda Keats emplea recursos poéticos que ha perfeccionado en los cinco poemas escritos en la primavera de 1819, pero prescinde del narrador y aborda conceptos más concretos.
Al igual que otras odas, se sirve del pentámetro yámbico con cinco sílabas tónicas (precedidas por otras tantas átonas) por verso; sin embargo, a veces invierte el primer pie del verso con una sílba tónica, como en el primer verso ("Season of mists and mellow fruitfulness").