[2] Fue conocido como “el hijo del dalieño”, Ibn al-Dilai, y por “el de Almería”, al-Mariyyi.
Entre sus intereses están el hadith, problemas jurídicos o religiosos, diversas tradiciones, llegando también a ser experto en la ciencia de la fitna.
Estudió con el tradicionalista y autor de un tratado geográfico-etnológico Abu Umar b. Abd al-Barr.
Regresó a Almería hacia 1041, justo cuando la ocupa el tuyibí Abu-l-Ahwas Man, padre de Almotacín.
Fue enterrado en el cementerio o mácbora del barrio del Aljibe o Cisterna, Al-Hawd, (La Chanca y Pescadería), en la parte occidental de la ciudad de Almería.