La cláusula sobre literatura estaba particularmente orientada para combatir el fenómeno de las (auto)publicaciones clandestinas conocidas como samizdat.
[1] Este artículo fue la herramienta legal más comúnmente usada en la URSS para combatir el anteriormente mencionado fenómeno de los disidentes.
Poco después del proceso judicial contra Siniavski y Daniel, el Código Penal soviético fue ampliado con el atenuado artículo 190-1, el cual versaba sobre “La diseminación de invenciones falsas conocidas que difamen al Estado soviético y su sistema social” (1967).
Aquel último consistía básicamente en la repetición del artículo 70, con la omisión de la frase “propósito antisoviético”.
[1] El militar y posterior disidente Petró (Piotr) Grigorenko escribió en sus memorias que cualquier crítica contra el gobierno soviético o eventos (oficiales) en la URSS era fácilmente clasificada como ASA.