Durante ese periodo fue miembro fundadora de varias iniciativas culturales contestatarias como la Revista de Crítica Cultural y la Academia Imaginaria.
[4] Es la primera mujer en ocupar estos cargos en la historia de las mencionadas instituciones.
[5] Escribe crítica de artes visuales y de literatura, por lo que ha obtenido diversos reconocimientos.
[6] Que hayamos convocado, unas líneas más arriba, a Adriana Valdés y Enrique Lihn no es casualidad.
Valdés fue la primera crítica de arte que se fijó en el trabajo de Jaar antes de que emigrara a Nueva York, y ha escrito algunos de los mejores textos sobre el artista, lo que no es decir poco, pues de Jaar han escrito filósofos y teóricos tan importantes como Georges Didi-Huberman, Griselda Pollock y Jacques Rancière.