Es un líquido incoloro e inflamable, que se encuentra en muchas frutas, a las que confiere sabores característicos y un olor dulzón a plátano o manzana.
El acetato de butilo se fabrica habitualmente a mediante la esterificación de Fischer del butanol (o sus isómeros, para obtener el éster isómero correspondiente) y ácido acético, en presencia de ácido sulfúrico:[2] El acetato de butilo se utiliza principalmente como disolvente para resinas sintéticas,[3] pinturas y tintas.
Se utiliza también en la fabricación de lacas, plásticos, películas fotográficas, y cueros artificiales.
Sus vapores forman con el aire mezclas inflamables o explosivas a temperatura ambiente.
[3] El sabor de las manzanas, especialmente en la variedad 'Red Delicious', se debe en parte a este compuesto.