Acestes (en griego antiguo Ακέστης) fue el hijo del dios-río siciliano Crimisos y de una mujer troyana llamada Egesta o Segesta que fue enviada por su padre Hippotes o Ipsostratos para evitar ser devorada por los monstruos que abundaban en Troya desde que los troyanos habían rechazado hacer ofrendas a Poseidón y a Apolo, para agradecer la construcción de las murallas de la ciudad.
Este volvió a Troya en tiempos de Príamo y tomó parte en la guerra.
En la mitología romana, Acestes o Egestes (literalmente "cabra agradable"), era el hijo de Criniso y una mujer dardania.
Allí fueron celebrados los juegos funerarios por Anquises, el padre de Eneas.
En la Eneida, Acestes participó en una prueba de destreza y tiró su flecha al aire, que se incendió como un presagio enviado por los dioses: "Aquí a los ojos, de súbito, se presenta un prodigio que iba a ser magno augurio [...] Pues, volando, ardió entre las límpidas nubes la caña y marcó una vía con llamas..."[1]