Esto quiere decir que, teniendo diferentes condiciones de carga y el mismo régimen, por ejemplo, subiendo una cuesta a 3000 rpm y bajando la misma cuesta a las mismas 3000 rpm, la diferente posición de la mariposa nos permite ajustar el llenado del cilindro y, por tanto, la fuerza de la combustión, con el mismo régimen, manteniendo siempre la proporción aire combustible o factor lambda.
Como la potencia de un motor es igual al par multiplicado por el régimen motor (rpm), se puede incrementar o disminuir ésta mediante la restricción de gases para la mezcla aire/combustible.
Normalmente, la válvula del acelerador está mecánicamente unida al pedal o a una palanca.
El par del motor se regula controlando la cantidad de combustible que es inyectado en el cilindro.
[2] Algunos motores tienen algún tipo de control del acelerador, pero la forma en la que se regula la potencia es a menudo dispar.