Acatlán de Osorio

Este topónimo aparece registrado en el Códice Tulane, originario de esta localidad.

En esa época se produjeron las llamadas cabecitas colosales, esculturas de cerámica que representan cabezas humanas.

La charrería es una costumbre tradicional que da colorido a las tardes de jaripeo para los barrios en sus fiestas profanas.

En los desfiles cívicos donde los hombres andan a caballo con sus trajes suntuosos, completaban el Júbilo y emotividad de esas festividades dedicadas con gran respeto a los héroes de la Patria.

El conquistador Hernán Cortés dejó un manuscrito en la población de Tehuitzingo pero se ignora su paradero hasta la fecha.

El día 16 de noviembre del mismo año vuelve a sostener otro combate con Samaniego y Lamadrid en el cerro de la Chinanteca obteniendo la victoria, esta vez el general don Vicente Guerrero.

Cabecita colosal de la Mixteca Baja. Procede de Acatlán de Osorio ( Puebla ), período Clásico mesoamericano (ss. II-VII/VIII d. C.). Colección del MNA .
Artesana del barro de Acatlán de Osorio, trabajando y vendiendo sus artesanías.
Artesano del barro de Acatlán de Osorio, trabajando y vendiendo sus artesanías.