Su hijo, Eusebio Güell y Bacigalupi, igualmente empresario, fue el mecenas de Antoni Gaudí.
Se inició una suscripción popular para sufragar el coste del monumento, en la que participaron más de 20 000 personas y unas 50 entidades.
El proyecto fue encargado al arquitecto Joan Martorell, quien diseñó un ampuloso pedestal compuesto por un basamento octogonal sobre el que se elevaba un podio cuadrado con columnas estriadas adosadas a sus cuatro ángulos, en cuya parte inferior se encontraban cuatro figuras alegóricas esculpidas en altorrelieve: la Agricultura, obra de Maximí Sala; el Arte, de Francisco Pagés Serratosa; la Marina, de Eduard Alentorn; y la Industria, de Torquat Tasso.
Coronaba el monumento la figura del homenajeado, obra de Rossend Nobas.
Entre 1941 y 1945 el monumento fue reconstruido por el arquitecto Joaquim Vilaseca y el escultor Frederic Marès, quien realizó la estatua del empresario basándose en fotos del original, obteniendo un resultado bastante parecido.