12,7 × 99 mm OTAN

El anterior cartucho estándar para los fusiles de francotirador era el .30-06 Springfield, pero el 12,7 × 99 mm OTAN es más preciso a gran distancia.

El cartucho fue ideado durante la Primera Guerra Mundial por John Browning como respuesta al pedido de un arma antiaérea.

El desarrollo del cartucho 12,7 × 99 mm OTAN se confunde a veces con el del cartucho alemán 13,2 mm TuF, que había sido desarrollado en Alemania para el fusil antitanque Mauser 1918 T-Gewehr con el cual se pretendía detener a los tanques británicos en la Primera Guerra Mundial.

Sin embargo, tras unas cuantas pruebas, la munición alemana fue descartada debido a que su desempeño era inferior al .30-06 Springfield sobredimensionado y porque era un cartucho con semi-pestaña, lo cual lo hacía poco apropiado para un arma automática.

[cita requerida] Décadas más tarde, el 12,7 × 99 mm OTAN también sería empleado en fusiles de gran potencia.

Durante la Segunda Guerra Mundial, el cartucho 12,7 × 99 mm OTAN fue principalmente empleado por la ametralladora "Browning M2" en los papeles de arma antiaérea y antivehicular.

Un francotirador experimentado puede neutralizar toda una unidad de infantería al eliminar varios blancos (soldados o pertrechos) sin revelar su ubicación exacta.

Medidas en milímetros, no aptas para uso en recarga.
Bala de un cartucho 12,7 × 99 mm OTAN