Þórólfur Björnsson

Þórólfur baegifótr Björnsson (apodado Thorolfur el Cojo, n. 900) fue un caudillo vikingo y bóndi de Hvammr, Snæfellsnes en Islandia.

Þórólfur fue de los últimos colonos en llegar a la isla, junto a su madre, pero a su juicio la tierra que ocupaba no era suficiente y buscó un duelo (holmgang) con algún colono que no tuviera lazos familiares que después le reclamasen una compensación; así encontró a Úlfarr kappi, que ya era anciano y sin descendencia, a quien retó a un duelo por sus tierras y venció, pero el viejo guerrero le hirió en el pie que le produjo una cojera de por vida, de ahí vino su apodo.

[3]​ La muerte de Þórólfur se presentó atípica, tras sentirse indispuesto y permanecer sentado en su alto pedestal toda la noche, murió allí mismo en algún momento de la víspera y lo encontraron así mismo sentado y con los ojos abiertos al día siguiente.

Tras su entierro en un túmulo, las supersticiones locales le achacaron algunas muertes, acontecimientos extraños y desaparición de ganado, y los habitantes creyeron ver en él a un no muerto, un draugr, que se presentaba por las noches en las granjas de sus vecinos y que aterrorizaron a todo el valle, convirtiendo su hacienda en un lugar maldito.

Su hijo Arnkel se vio forzado a exhumar el cadáver y enterrarlo en otro lugar.