Se considera un índice que tiene en cuenta valores ecológicos y el desarrollo sostenible como necesarios para el bienestar social.
El IPR está diseñado para sustituir tanto al criticado Producto interno bruto (PIB) como indicador de progreso económico.
[1] El IPR es similar al Índice de bienestar económico sostenible (IBES) aunque incluye más variables.
En la economía estadounidense puede apreciarse que si bien PIB per cápita se ha duplicado desde 1950 hasta finales del siglo XX -en unos 50 años-, el IPR muestra unos datos no solo distintos sino contrarios: creció durante los años 50 y 60, para bajar -hasta un 45% desde 1970-.
Estos datos mostrarían que la economía real y el bienestar se han estancado.