Su importancia se debe a que es el hábitat de diferentes especies de aves, mamíferos, peces, así como del emblemático delfín de agua dulce (bufeo) y gracias al río Ibare se constituye en un regularizador del ciclo del agua en la región.
[2] Además cuenta con una importancia cultural debido a la presencia de varios pueblos indígenas y comunidades tradicionales asentados dentros del área protegida.
El área protegida municipal presenta un clima tropical, húmedo y cálido con temperaturas promedio de 27° a 38°.
La vida de estas comunidades se organiza en estrecha relación con los ríos Ibare y Mamoré.
Por su cercanía al centro urbano de Trinidad tiene un gran potencial turístico.