Vinalia

La Vinalia urbana que se celebraba en Roma el 23 de abril era la fiesta vinícola compartida por Venus como patrona del "vino profano" (vinum profanum o vinum spurcum) para su uso cotidiano, y Júpiter como patrono del más fuerte y más puro vino sacrifical (temetum).

Las ceremonias se hacían en honor a Venus, cuyos poderes habían proporcionado a la humanidad el vino corriente, y los hombres y mujeres por igual, probaban el vinum spurcum prensado del otoño anterior.

[1]​ Muchachas corrientes (vulgares puellae) y prostitutas (meretrices) se reunían en el templo de la Colina de Venus Ericina - probablemente, en distintas ocasiones, para hacer el amor o prestar buena compañía - para ofrecer a la diosa mirto, menta y juncos escondidos entre ramos de rosas.

Para algunas fuentes, el belicoso Mecencio habría reclamado esta vendimia como parte de la deuda, no Júpiter.

Estas observaciones fueron corroboradas por Plinio el Viejo[4]​ En la práctica, sin embargo, la fiesta tuvo una fuerte carácter popular y amplias conexiones con el culto a Venus, como diosa patrona del vino ordinario, religiosamente "impuro" (vinum spurcum).

Vendimia en un mosaico romano de Mérida, España.
Sarcófago romano con escena de vendimia. c. 290-300.
Pisando la uva en un mosaico romano de Mérida.
Sección de los Fasti Praenestini, calendario de Verrius Flaccus. VIN significa Vinalia, fiesta del vino, y ROB, Robigalia, fiesta para protegerse de las enfermedades de los cultivos.