Mecencio (en latín, Mezentius) fue un rey etrusco expulsado de la ciudad de Agila por sus súbditos, dado que solía reinar basándose en el miedo y el maltrato a los estamentos inferiores.[1] Es presentado en la Eneida de Virgilio como el prototipo del sujeto soberbio, impío y cruel.Durante esta guerra, Eneas, protegido por su madre Venus, entabla combate con Mecencio y lo deja moribundo.Intenta defender a Mecencio su hijo Lauso y es muerto por Eneas.[2] Más tarde, el rey etrusco curará sus heridas en la margen del Tíber[3] e intentará vengar la muerte de su prole inútilmente, ya que lo matará el mismo Eneas.